Del 21 al 27 de octubre
El sábado 21 de octubre, después de visitar el sitio de Tiwanaku, tomé un bus para la Paz, y después cruce esta ciudad en teleférico, en una hora (hay 5 lineas en servicio sobre 9 planeadas, la primera abrió en 2014, para la movilidad es impresionante. Los paceños con quien lo hable estan felices del servicio, pero también escuche que no es muy rentable), y otro bus para Coroico.
La Paz
Llegué a las 5, y me encontré con Lise, una francesa que conocí en el cañón del Colca. Habíamos visto que había un festival en Coroico este fin de semana. Lise había llegado el día anterior, y me explicó que la ciudad estaba muy animada, con las calles llenas de gente y qur vió ceremonias de benedicción de coches con cerveza (su artículo aquí). En efecto, parece que el día principal de la fiesta fue el 20 de octubre, y se celebraba la virgen de la Candelaria. El 21 había menos gente en la ciudad, pero todavía, encontramos bolivianos buena onda, que nos regalaron cerveza y con quienes hablamos bastante, hasta de geopolítica! El día siguiente, Lise se fue temprano para seguir su viaje (nos volveremos a encontrar) y me quedé en la ciudad. Aproveché para caminar en los alrededores, hacia unas cascadas, no espectaculares pero me pude bañar, y esto siempre es bueno 🙂
Coroico
Coroico
El lunes 23 de octubre, tome un bus para volver a la Paz, que había visto muy rápido desde el teleférico. Me quedé hasta el viernes (se siente bien quedarse un poco en el mismo lugar, después de varias semanas cambiando de lugar casi diario), caminé por todos los barrios, me subi a todas las líneas del teleférico, subí al barrio El Alto que se volvió una ciudad, a 4000m de altura, donde está el jueves el más grande mercado de pulgas de SurAmérica, y fui al valle de la Luna, un lugar con formaciones rocosas bastante impresionantes.
La Paz
El Alto
El Alto
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz – Cholita
La Paz
La Paz – Reloj al revez puesto por Evo Morales para diferenciarse del emisferio norte
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz
La Paz – Foetus de lama
La Paz – Valle de La luna
La Paz – Valle de La luna
Me gustó bastante la Paz, creo que podría vivir en esta ciudad. No había escuchado solo buenas cosas sobre Bolivia, por ejemplo me habían dicho que los bolivianos no eran muy amables, y que la gastronomía era pobre. Mi impresión fue diferente: los bolivianos me parecieron sonrientes, y prefiero que sean indiferentes a que me miren como si yo vendria de otro planeta porque no me veo igual que ellos. Y de la comida, pues disfrute deliciosas ensaladas de fruta, almuerzos en el mercado buenos y diversos, sandwiches de huevo o de palta (aguacate). Y siendo el pais más barato de SurAmérica, los precios para comer y alojarse son ridículos.
El sábado 28 de octubre, sali de la Paz para ascender el Huayna Potosi, a 6088m de altura. Les cuento la próxima vez!