La ciudad la más alta del mundo

17 – 18 octobre

Jaakov, que había encontrado en el cañón del Colca, me había contado que la ciudad la más alta del mundo estaba en Perú y que quería ir. Desafortunadamente, no tuvo tiempo. Pero me habló tanto de esto que me interesó y después de algunas investigaciones, decidí ir.
Se llama La Rinconada, y es una ciudad minera, y debido al aumento del precio del oro, su población subió desde unos cientos de personas al principio del siglo, hasta decenas de miles -los locales me dijeron todo tipo de número cuando pregunté, desde 40,000 hasta 90,000- hoy en día.
El martes 17 de octubre, llegué a Putina, la última ciudad antes de la Rinconada. Me quedé el día, y disfrute de baños termales, y el miércoles desperté temprano y fui a tomar un colectivo, en el lugar donde salen, fácil de encontrar por el hombre gritando «La Mina, La Mina!».
Hay muy poca información en línea, y no es un lugar turístico: el entorno es bastante hostil: a 5,200m de altura, no hay mucho oxigeno. Además, por el crecimiento rápido de la ciudad, hay poca infraestructura, y no hay sistema de recolección de basura. Por lo tanto, hay montones de basura en los alrededores de la ciudad, lo que provoca un olor desagradable. Se puede ver la basura desde la carretera, y hay aves que viven en la basura y se alimentan de ella.

En el camino a La Rinconada

El centro de la ciudad parece bastante comuna, parecido a una ciudad peruana normal, con restaurantes, puestos de comida, y hoteles. También hay un mercado y una cancha de fútbol. Pero las similitudes paran aquí.

La Rinconada

La Rinconada

La Rinconada

Comí un desayuno y pregunte por el baño, pero los restaurantes no tienen baño, de hecho nadie tiene: no hay agua corriente. El agua viene de un glaciar arriba de la ciudad, les cuento esto después. Hay baños públicos, y hay que pagar.
Caminando en la ciudad, me dí cuenta que todo gira alrededor del oro y del negocio minero. Hay cientos de tiendas que compran oros. También es muy fácil encontrar ropa para la mina y material, así como lugares para repararlo. Los mineros también van a molinos, manuales o eléctricos. Ahí se extrae el oro de las piedras, con agua y mercurio. En consecuencia, el lago abajo de la ciudad está contaminado y no apto para la vida animal.

La Rinconada – tiendas que compran oro

La Rinconada – Molino

La Rinconada

La Rinconada

Seguí caminando, y afuera del centro, me impresionaron las habitaciones, simples casitas de chapa de metal. Las noches deben ser heladas, ya que a las 9 de la mañana tenía mucho frío.

La Rinconada

En mi camino hacía la entrada de las minas, un señor me propuso llevarme «al hielo», arriba de la ciudad. Viéndolo, lo que me dice (hablar español es muy útil en este tipo de casos, para juzgar una situación) y las personas con quien estaba antes de hablarme, me pareció confiable y decidí seguirlo. Su trabajo es sacar agua del glaciar. Me mosteó la entrada de una mina, cerrada. Luego subimos al glaciar. Ahí hay cantidad de «pozos», grandes huecos donde el hielo se hunde. Se saca el agua con sifón hasta el pueblo, por tubos de plástico negro. Mi nuevo amigo me explica que vende el bidón de 20L por 1 sol (US$ 0.30). El agua se usa para el consumo humano, los baños y duchas, la cocina, y en los molinos.

La Rinconada

La Rinconada

La Rinconada

La Rinconada

La Rinconada

La Rinconada – tubos que transportan el agua

Desde el glaciar, se ven las minas. Pequeños camiones salen, tiran montones de piedra al lado del camino, y vuelven a entrar. También se escuchan explosiones de dinamita adentro de la montaña.

La Rinconada – minas

La Rinconada – minas

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Los mineros trabajan gratis, con la esperanza de sacar oro durante las horas en cuales pueden guardar lo que encuentran, el resto perteneciendo al dueño de la mina. Rezan a la forma de una mujer acostada arriba de la montaña, con la esperanza de encontrar oro, y también para protegerlos de accidentes posibles.
Desafortunadamente, los que tienen suerte gastan todo lo que ganan en alcohol y mujeres (aunque no visible, la prostitución es común, parece) y pocos logran a salir del infierno que es la Rinconada.
La vida es difícil para la mayoría en la ciudad la más alta del mundo… Y no es solo por la altura. Por cierto, es uno de los lugares los más interesantes que he visitado.

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